De atreverse y crear

La intención del corazón es atreverse y crear. Es muy común en estas fechas escribir sobre lo vivido el año anterior. Es como si necesitáramos ordenar y catalogar nuestra vida en diferentes recipientes etiquetando luego cada experiencia para tenerla ordenada bajo algún tipo de título que la defina y nos dé comprensión. La mente a menudo trabaja así.

Es común también en estas fechas establecer goles y metas para el año siguiente que tan solo el 8% de la población sostiene pasados 30 días. Sin embargo todos estos simbolismos tienen fuerza y aunque siempre hay gente a favor y gente en contra de estos rituales, creo que es más bello dejar que cada uno haga lo que necesite para llevar a tierra los sueños.

Sigue leyendo esta entrada aquí:

Ahora mismo, detrás de mi pantalla del ordenador puedo ver la marea del cantábrico subir, llenando la ría y cubriendo todos los huecos del cauce del Saja. Capas de colinas verdes bajo un cielo extraordinariamente azul y la sierra nevada detrás.

Meses antes las vistas eran muy diferentes. Hacía años que soñaba con una ventana con vistas.

Una ventana con vistas

En el imaginario una ventana con vistas era un cambio a poder ver el horizonte. Una transición a lo más suave, al respeto de los tiempos de la naturaleza, a una vida más comprometida en llevar a cabo lo que siento.

En la realidad física, una ventana con vistas ha implicado decir sí al impulso que me susurraba desde el fondo del corazón para enfrentar los miedos que llegaban al entender lo que significaba el cambio. Siete años en Madrid, amistades que fueron familia durante todos esos años, un grupo enorme y maravilloso de personas con las que me juntaba a practicar cada día y la absoluta incertidumbre de lo que vendría después.

Me fui de Madrid saltando de pleno al vacío con la confianza de que lo que late en la piel es necesario escucharlo y absolutamente digno de ser creado.

La creación del sueño

Creo que hacer cambios que se acerquen a lo que sientes no siempre es fácil ni lo guía un camino de rosas, pero da libertad. Creo también que tomar la decisión de dar este paso ha sido una de las cosas más difíciles que he hecho en mi vida. Hacer este cambio implicaba despedirme de muchísimas personas de las que formaba parte muy íntima. Decenas de alumnos que habían compartido cientos de horas, silencios, dudas, sueños, miedos, lágrimas y sonrisas, abrazos y bailes conmigo… Cientos de horas de práctica dentro y fuera de la esterilla y de las que me acuerdo cada día.

Sin embargo, fue mucho más difícil tomar la decisión que llevar los pasos siguientes hacia adelante. Lo que me hace recordar que cuando hay algo que queremos llevar a cabo, sea de la magnitud que sea, solo tenemos que ponernos en marcha. Dar uno a uno, los pasos que harán realidad la creación de lo que estamos imaginando para nosotros.

Para mi, dar ese paso, requiere, sin falta, el compromiso absoluto con lo que queremos crear. Y la fuerza necesaria para la creación de algo nuevo que nos sostenga y nos permita seguir creando.

Es necesario dar los primeros pasos ya que la realidad se encargará de ir guiándonos en la dirección que necesitamos. En mi caso, ha sido la creación de una plataforma online que me permita conectar más allá de las fronteras, para que cuando nos juntemos personalmente la sensación de familia y equipo se haya ido creando. Y al vernos, nos reconozcamos.

Y así ha ido ocurriendo, mucho me habéis conectado desde diferentes partes del mundo encendiendo luces que no sabía que existían y estoy infinitamente agradecida por todos vuestros mensajes. Por vuestra presencia y por compartirme vuestra historia.

Lo esencial

La creación de nuestro propio mundo, de nuestra vida y del impacto que generamos con ella, no es una cosa para pasar por alto, para posponer o dejar para otro día.

Es esencial cultivar la confianza de que con mis propias manos, tengo la capacidad de crear mi mundo y más aún, que ya lo estoy creando. De que hay una voz que me susurra lo que quiero aportar a este espacio en el que estoy. La confianza de que no estamos solos, de que nuestra mirada se cruza cada día con quien escogemos para crear estos lugares. Que en un mundo como en el que vivimos siempre hay espacios y rincones para la belleza, para el compartir, para la comunidad y la expresión. Y de que todo forma parte de lo que estamos creando.

Compartir

Estés donde estés, te deseo que hoy sea un día lleno de vida. Que la vida sostiene tantos momentos de calma como de dudas. Que nos permitamos los espacios de alegría y que volvamos a recuperar el asombro por las pequeñas cosas.

Que este día, esta semana, este mes, este año o como quieras manejarlo, hagamos más espacio para todo lo que sentimos y espacio para los que nos acompañan en esta creación. Que no olvidemos que estamos en nuestras manos, y que en ellas tenemos la capacidad infinita de acariciar nuestra vida. ¡Feliz día, mundo!