Descripción:
Nuestro cuerpo busca naturalmente el equilibrio. Cuando algo nos cuesta es natural usar la fuerza más que el sentido de equilibrio. Hoy exploramos esta idea de modo que la práctica no nos agote, si no que nos de energía y percepción.
Nos movemos en todas direcciones recordando la suavidad por encima de todo de modo que no despertemos a la «invitada de honor». Estar en el cuerpo así nos aporta ligereza y libertad.
Trabajamos con la rotación interna y externa de la cadera, la movilidad de las costillas y hombros y jugamos con el equilibrio. Acabamos con una práctica de pranayama volver a nuestro día con energía y ligereza. Una buena práctica para despertar los sentidos de percepción y encontrar equilibrio.
Necesitas: bloque o cojín si necesitas para sentarte.